SCACCE DE RAGUSA
INGREDIENTES
- - 500 g de harina de trigo duro remolida
- - 500 g de ragusano sazonado (queso duro tipo parmesano)
- - 700 g de salsa de tomate
- - 25 g de levadura para disolver
- - ¼ de litro de agua
- - 1 cda de sal
- - 3 cebollas rubias
- - 5 cdas de aceite de oliva
- - Una ramita de perejil para dar sabor a la salsa
- - Sal
- - Pimienta
Probá esta una receta tradicional de la cocina siciliana y sobre todo de Ragusa.
PROCEDIMIENTO:
1. Comience a preparar el Ragusa scacce de la salsa. En una sartén grande, sofreír las cebollas con agua para que sean más digeribles: una vez blandas y al agua aja evaporado por completo verter la salsa, añadir el perejil y dos cucharadas de aceite.
2. Cocine durante aprox una hora, revolviendo ocasionalmente. Al final agregar sal,
pimienta y dejar enfriar por completo. La salsa debe estar fría a la hora de sazonar la scaccia, por lo que es recomendable prepararla la noche anterior. Para la masa, mezcla en un bol la harina, tres cucharadas de aceite y la levadura disuelta.
3. Amasar hasta formar una superficie homogénea y brillante. Para que la masa sea homogénea, la podes golpear contra la superficie varias veces mientras la trabaja. Agregue harina si es necesario. Dejar leudar tapado con un paño durante media hora. Ralla el ragusano (queso duro estilo parmesano) y reserva.
4. Ponga un poco de harina en la superficie de trabajo, divida la masa en cuatro partes iguales: serán la base de sus cuatro scacce, que se prepararán una a la vez. Extiende la masa con un rodillo hasta formar un rectángulo que ajustarás con un cuchillo. Extienda la salsa fría verticalmente en el centro.
5. Agregue el queso, agregue un poco de aceite y proceda con el cierre: doble un lado hacia el centro.
6. Proceda también con el otro lado, cerrando la scaccia un libro. Finalmente dobla este mismo lado una vez más, para formar una especie de paquete. Selle los bordes exteriores con los dedos y dóblelos hacia adentro para asegurarse de que se cierren.
7. Pinchar la superficie con un tenedor y pincelar con aceite. Cubra una bandeja para hornear con papel pergamino, cepille con aceite para evitar que la cáscara se pegue y hornee a 220 ° durante 30- 40 minutos o hasta que esté dorada.